Asi era ella
Desde el cielo a mi llegó una especie de amor que te juro que no conocía, que partió en dos mi vida. Poco a poco iluminó el más oscuro rencor, me abrazaba cada noche fría, de su mano se iba la agonía.
Desde el cielo a mi llegó una especie de amor que te juro que no conocía, que partió en dos mi vida. Poco a poco iluminó el más oscuro rencor, me abrazaba cada noche fría, de su mano se iba la agonía.
Cuántos signos de interrogación entre libros de una biblioteca y después, las tazas de café nos colgaron de la misma luna. Esos lentes no dejaron ver el secreto bajo tus pupilas, que asomaban un eterno amor, donde yo sólo veía a una amiga. Qué tonto fui, que nunca vi, medalla de oro de los distraídos. Soy un rotundo descuido.