La chispa adecuada
Las palabras fueron avispas Y las calles como dunas, cuando aun te espero llegar En un ataúd, guardo tu tacto y una corona con tu pelo enmañado Queriendo encontrar un arcoiris infinito Mis manos que aun son de huesos Y tu vientre sabe a pan, la catedral es tu cuerpo Eras verano y mil tormentas y yo el león Que sombrías paredes he vuelto a pintar del mismo, color No se distinguir entre besos y raíces No se distinguir lo complicado de lo simple