Vestida de azúcar
Tengo tantísimo miedo, ya casi te vas y yo aún no me atrevo. Tanta precaución que no acude el deseo, cuidando no salir lastimada, me quedo sin nada...
Tengo tantísimo miedo, ya casi te vas y yo aún no me atrevo. Tanta precaución que no acude el deseo, cuidando no salir lastimada, me quedo sin nada...
Enamorado, ilusionado, me pongo rojo cuando te hablo. Superdotado de sentimientos, voy declarándote lo que siento, vida. Cómo explicarte este gran amor que llevo dentro...
Desde que llegaste, no me quema el frío, me hierve la sangre, oigo mis latidos. Desde que llegaste, ser feliz es mi vicio, contemplar la luna, mi mejor oficio.
Todo viene todo va pero hay quien se queda en el medio. No pretendo convencerte solo quédate un poco más. Después de ti que puedo esperar si tú eres de esas cosas... No se olvida esos besos que me diste...
Siéntete segura, que no te quepa duda, cuenta con mi vida y mi devoción. Vivo para amarte, para mí alejarme es como quedar sin respiración. El cielo en tu mirada cada madrugada es a donde pierdo mi confusión...
Quemándome en silencio, entre el odio y el rencor, fui abriéndote una causa de mil hojas de dolor. Pasé noches enteras preparando mi venganza y ahora es el momento de tomarme la revancha.
Derramaré mis sueños si algún día no te tengo, lo más grande se hará lo más pequeño. Pasaré un cielo sin estrellas esta vez tratando de entender quien hizo un infierno el paraiso...
Adonde va el amor que calla, que se lleva en el alma y se va alejando como el viento. Adonde va el amor que olvida, que te quema la vida y se duerme poco a poco con dolor.
Atormentada por amor, mujer, dolor, pudo mas la fe y mi corazón cerró su herida. Despierta, soledad, envuélveme... Soy esa extraña dama que está dispuesta a vencer.