El amor después del amor, tal vez, se parezca a este rayo de sol y ahora que busqué y ahora que encontré el perfume que lleva al dolor en la esencia de las almas, en la ausencia del dolor ahora sé que ya no puedo vivir sin tu amor.
Había soñado tanto este precioso momento, pero esto es lo máximo, estoy... Estoy entrando en tu cuerpo. Siento tu pecho agitado y tu vientre como el fuego, los dos estamos temblando de pasión y delirio, de amor y deseo.
Enséñame a olvidar las cosas que viví contigo, a seguir sin ti de nuevo mí camino, a poder vivir sin verte, sin amarte, sin tenerte. Enséñame lo que nunca me enseñaste del olvido, sólo así por fin sabré que tú te has ido y podré vivir en paz conmigo...
Soy tu gitano, tu peregrino, la única llave de tu destino, el que te cuida más que a su vida... Soy tu ladrón. Soy tu gitana, tu compañera, la que te sigue, la que te espera. Voy a quererte aunque me saquen el corazón.
No me preguntes qué pasa, es una emergencia de amor, un canto libre que me traspasa hasta el fondo de mi corazón. Mi pan, mi vino, una exigencia del destino, una tormenta que atraviesa mi piel dulcemente... me parte el alma.
La primavera es la estación del renacimiento. Una vez más ocurre el milagro: de los árboles deshojados renacen nuevos brotes y una vez más, hay cosecha, es decir, vida...
Me muero de ganas por sentir tu cuerpo junto al mío. Me matan las ganas por vivir y por morir contigo, en donde los sueños no tengan final, en donde la luna nos pueda tocar, en donde no exista ni un golpe de vista que araña la libertad.
Dímelo, como apartarte de mi. Como evitar y no pensar en ti, cómo decirle a mis ojos que no te miren y a mis brazos pedirles que no te esperen. Yo por ti me siento vivo...
Desde que llegaste, no me quema el frío, me hierve la sangre, oigo mis latidos. Desde que llegaste, ser feliz es mi vicio, contemplar la luna, mi mejor oficio.